La Universidad Privada de la Península (UPP) campus Mérida, fue sede de la tercera edición Iron Chef 2019, este jueves 18 de julio, un evento gastronómico que reunió los tres campus de esta institución de educación superior, para poner a prueba las habilidades y conocimientos que los alumnos desarrollaron a lo largo de la Licenciatura en Gastronomía.
El concurso lo protagonizaron tres equipos, representantes cada uno de ellos de los campus de Tekax, Felipe Carrillo Puerto y Mérida. Los equipos dispusieron de 4 horas para elaborar un plato fuerte y un postre enfocados en la cocina mexicana. Todos los platillos elaborados fueron creaciones innovadoras y únicas de los propios alumnos.
Después de la elaboración cuidadosa de los platillos, fueron evaluados por el jurado conformado por la chef Elizabeth Alejandra Hurtado Moreno, la participante de la sexta temporada de Masterchef México, Addy Angulo Mendoza y el Souschef Raymundo Pinto Rodríguez, quienes al final eligieron al equipo ganador.
Este
evento, sin duda consigue motivar a los jóvenes a seguir formándose en su
especialidad, así como también consigue acercarlos a una experiencia laboral
real, donde ponen en práctica las habilidades y competencias que adquirieron a
lo largo de su carrera y seguirán desarrollando en su vida profesional.
Existe
una estrecha relación entre emoción y creatividad. Como espectadores, la obra
de arte nos conmueve. Como creadores, las distintas disciplinas artísticas te
permiten experimentar el interior y expresarlo. En nuestro cerebro tenemos un
área que es la racional y otra que nos aporta creatividad. Por lo que tenemos
la parte racional del ser humano y su pensamiento lógico, mientras que en la
otra parte es donde se conforma la parte potencialmente creativa y emocional.
Por tanto, creatividad y emociones van de la mano.
La
creatividad o pensamiento creativo tiene múltiples ventajas como, por ejemplo:
Apoya
en la Resolución de Conflictos. Una mente creativa
hace que tengamos la capacidad de valorar o proponer diversas soluciones ante
un mismo problema, forjando seguridad en nosotros mismos de manera que nos
enfrentaremos al conflicto de forma serena y decidida.
Propicia
un ejercicio de introspección.
Hace que nos conozcamos a nosotros mismos, ver lo que nos emociona, lo que nos
afecta y así poder fomentarlo o buscar soluciones en caso de que nos molesta.
Un ejemplo claro lo tenemos en los dibujos infantiles, dependiendo del estado
de ánimo que el niño tenga y del ambiente que lo rodea, dibujará de una manera
u otra a su familia (distintos tamaños, colores, dimensiones y trazos en el
dibujo).
Sentido
de la perspectiva.
Ofrece la posibilidad de que una misma visión puede partir de distintas perspectivas,
esto extrapolado al mundo emocional viene a decir que ante una determinada
situación caben diversas opiniones al respecto que pueden coincidir o no con la
que nosotros tenemos.
Por
lo que aquí no es cuestión de talento, es simplemente dar salida a las
emociones fortaleciendo el bienestar. Todas las expresiones artísticas tienen
una estrecha vinculación con las emociones, con las que se relacionan en un
doble sentido: por un lado, del espectador, despertándolas; por otro lado, el
del artista o intérprete, como medio para canalizarlas y comunicarlas.
Como
una herramienta de gestión emocional, hoy día algunas empresas, personas o
talentos son conscientes de su relevancia y utilizan intencionadamente
estrategias de gestión de la dimensión emocional en sus proyectos creativos.
Más efectivo incluso que un equipo que sepa utilizar todas las técnicas de
creatividad, es aquel que sabe cómo integrar sus emociones.
Las emociones, sentimientos, deseos, afectos, motivaciones, están presentes en todas las facetas de la vida y en todo grupo humano. Es por ello que es importante resaltar que en tiempos actuales la creencia de que el trabajo al ser un entorno serio y que no se puede hablar del tema creatividad y las emociones, ya sea ha quedado fuera. Hoy día también las empresas y las personas requieren expresar sus emociones a través de las distintas expresiones artísticas. La importancia de gestionar las emociones a través de la creatividad es variada y aquí te expongo algunas de ellas.
Emociones
estéticas
Las
emociones estéticas, son aquellas que nos sobrevienen al contemplar o admirar
la belleza de algo, artístico que nos aporta bienestar. Fortalecer y nutrir el contacto con las
distintas expresiones artísticas, disfrutar de un excelente libro, contemplar
un cuadro, escuchar música interesante, acudir a danza y la pintura, entre
otras. Alimenta las emociones positivas, inspiran y aquietan la mente. Cuando, por el contrario, nos situamos al
otro lado del espejo para ser nosotros los ¨creativos¨,
las expresiones artísticas se convierten en el espacio excelente para dar
salida a las emociones y lograr expresarlas.
Manifestar
la emoción
Es
importante practicar actividades que gratifiquen y permitan encontrar espacios
de apertura donde manifestar esas emociones que subyacen en el interior. Entre ellas se encuentran la danza, la
plástica, la música y la escritura que es un excelente inicio para encontrar
ese camino, además de liberar tensiones, fortalecer la relación de equilibrio y
expresión emocional.
Emociones
útiles
Las
expresiones artísticas comunican emociones.
Como
espectadores, la contemplación de una obra artística es susceptible de
despertar las emociones.
Las
emociones estéticas producen bienestar.
Practicar
una disciplina artística, sea danza, teatro, pintura, música, es una manera de
permitir salir a aquellas emociones que por uno u otro motivo se reprimen, en
el interior, canalizándolas.
A
través de la expresión artística podemos comunicar las emociones a los demás,
expresándolas libremente.
Explorar
y comunicar
Al
crear se explora emociones y le das salida, fortaleciendo el bienestar al
liberar aquellas emociones que no benefician. Toda disciplina artística
requiere tan alto grado de implicación personal, que mientras la llevas a cabo
estás gestionando tus emociones, sobre todo la rabia y la ira. Como
consecuencia de ello han surgido varias terapias artísticas, la musicoterapia,
la arteterapia, la danzaterapia, con doble objetivo y beneficio. Todas ofrecen
un espacio de expresión y experimentación donde generan gestión para la
fortaleza emocional.
El
beneficio de practicarlo tiene varios sentidos:
desde una mirada intrapersonal, que apoya a expresar los sentimientos, desde un
punto de vista interpersonal son un excelente medio de comunicación emocional.
Mucho
tiempo ha pasado y al fin regresé a casa, aunque sea por un tiempo corto. Visitar
a los padres, las mascotas, las plantas y el cielo que es testigo de varias
aventuras en mi propio patio, representan la alegría de sentir de nuevo el
hogar.
¡Mira
qué bonito!, las plantas de mi casa han crecido, ese es un nuevo color, el
patio lo recordaba más grande, mis mascotas se ven cansadas, no me reciben como
antes, mi mamá y mi papá tienen más canas, y ese adorno no estaba antes aquí,
ha cambiado de lugar. ¡Qué bueno es regresar a casa¡
Juegos en el
patio
¿Cómo
olvidar aquel día que mi hermano y yo nos
tirábamos piedras con una cuchara de plástico? En ese entonces no sabíamos que
era peligroso, sólo era diversión, un sencillo juego. Antes, los juegos se
creaban con lo que teníamos a la mano, como por ejemplo la “Chácara”. Bueno
en mi pueblo así le decían, pero es conocido como “el avión” en otros lados, y se trata de realizar una figura en el suelo
y tirar una piedra, un cristal roto o una tapa de refresco para avanzar, pero
no se puede pisar el lugar donde están los objetos. De verdad que era un juego
muy divertido.
También
se jugaba a la tiendita y el dinero eran las hojas de los árboles, o se jugaba
a las pistolitas, buscabas una madera que simulara ser un arma, pues en las
películas en blanco y negro que se ponían en la TV mostraba que los vaqueros
eran héroes y tratabas de imitarlos. Había muchos juegos en ese entonces,
creabas haciendo volar la imaginación.
Una sopa
caliente en primavera
Quizás
sólo sea en mi familia, pero teníamos la costumbre de comer caldo caliente de
verduras o de pollo en temporada de calor. Mi mamá nos obligaba a mi hermano y
a mí a comer todo lo que nos servía en el plato, y hasta ahora
cada vez que vamos de visita a casa, rogamos que no cocine caldo cuando impera
el calor de primavera.
Pero
sinceramente, qué bonito es que te reciban con un plato de comida caliente en
la casa, pues aunque es un recuerdo que en su momento te hacía enojar, ahora
causa risas ya que son detalles que se recuerdan que están con la familia.
El árbol de
huaya
¿Quién
no se cayó de un árbol de niño? Recuerdo mucho un gran árbol de “huaya” en el patio de la casa, que no
lo tumbaron antes de que pasaran accidentes.
De él vi caer a varios primos, a mi hermano y hasta los vecinos que subían al árbol a
cosechar huayas. Sinceramente yo prefería bajarlas con una “horqueta”, que es un palo largo con punta en forma una “Y”, para
poder tomar de los frutos de cualquier árbol, aunque las señoras del hogar las
usan para sostener su soga de lavado y colgar sus ropas a secar.
Asimismo, es tradición tener en casa una mata de “chaya”, y si bien nadie puede subir y caer de esta planta frágil, en cambio puede darte urticaria si no le pides permiso para tocar sus hojas. Crecer en una casa maya es una aventura donde corres el riesgo de sufrir algún percance por efectos de un árbol o una plata que parece inofensiva, si desconoces cómo relacionarte con el mundo vegetal. Al fin y al cabo éstas son enseñanzas que te da la vida y te recuerdan que aunque estés en lo más alto puedes caer.
Un sonido muy
particular
Despertar
con el sonido de los pájaros cantando, es una hermosa manera de saludar al
nuevo día, pues en una zona rural es normal escuchar y ver todo tipo de aves,
lo que te hace recordar que no estás en la ciudad y te alegras de percibir un
espectacular concierto. En definitiva, el canto de las aves es música contra el
estrés y de relajación plena, es algo asi como el eco de la naturaleza.
Un ambiente
natural
Todo es hermoso, el sol, el cielo está despejado, la casa, pero hay algo más: una sensación de tranquilidad, porque hasta un baño te hace maravillosa la mañana, y recostarte en una hamaca te perfecciona el día.
Tal
vez el ambiente se hace grato por la unión de todo lo que nos rodea en ese
instante, pues una visita a la casa de los padres te deja una sensación imborrable,
y se queda ahí cuando tienes que regresar a la ciudad a trabajar. Por último,
miras desde la ventana del coche y te despides de lo que dejas atrás y te llevas un costal de nostalgia sobre la
espalda.
Cada persona ha vivido la pandemia
desde espacios distintos. Para muchos ha sido una gran prueba porque se ha
visto afectada la economía, la dinámica del hogar, no sólo como pareja, sino en
los roles como padres, situación que ha generado mucho estrés.
En un sin número de hogares han pasado
por situaciones de dolor, conflicto, desde la enfermedad, la pérdida de trabajo
o disminución de ingresos en el hogar, hasta la pérdida de un ser querido, y
eso incide en la pareja, es aquí donde se vuelve importante haber desarrollado
herramientas de negociación y comunicación previas a la pandemia.
Un punto preocupante, es la evidencia
de los conflictos de pareja. Muchas veces estos eran preexistentes, por ejemplo,
los problemas de comunicación que se iban postergando.
Durante todo este tiempo se ha vivido
mucho tiempo con la pareja y todos esos malestares que de alguna manera eran evitados,
porque no se estaba presente para que sucedieran, empezaron a ser parte del día
a día y comenzaron a ser algo de lo que en ocasiones no se podía escapar u obviar.
Además de la falta de comunicación, otros problemas frecuentes han sido la confianza y el hecho de compartir espacios de trabajo, situación que genera muchos conflictos. El tema de pasar tanto tiempo con alguien que no estabas acostumbrado a no pasar tanto, porque tenías otro tipo de dinámica, trabajabas, salías, veías a otras personas y regresabas a casa, no importa como estuviera la relación, tener esa vida fuera del matrimonio es bueno, sano, es necesario, sin embargo, eso ha cambiado.
¿Cómo gestionarlo?
Lo primero es la disposición. Ambas
partes deben estar dispuestos a trabajar por la relación y ver si aún existe un
espacio para añadir fortalezas de manera sana. Tales como la comunicación, la
empatía, el amor de ambos y el llegar a acuerdos para todas las partes de su
relación-
La pandemia vino a disparar cosas que
ya existían, estamos en situaciones con un estrés mayor, muchos se sienten
ansiosos, nada dispuestos, impacientes, sin embargo, todas esas cosas de alguna
forma han estado en evidencia en otras situaciones.
Por eso, comunicarse y llegar a un
acuerdo es fundamental. Las parejas en ocasiones viven episodios estresantes,
sin embargo, la pandemia ha sido completamente inesperada.
Hay que identificar el problema y
abordarlo. Cada uno debe reflexionar y observar, como persona y no
necesariamente ver dicha crisis como un punto de quiebre, sino como una
oportunidad sustancial para fortalecer la relación.
La cantidad de responsabilidades
aumenta el estrés. Cuando uno de los dos son los encargados de quedarse en casa
debe coordinar todo, y ahora no cuenta con todo el apoyo de antes, por ejemplo,
que los hijos se vayan a estudiar en la mañana, sobrecarga su rol como madre o
padre, profesional y pareja.
Es posible que la pareja no vea las
necesidades del hogar o no esté consciente de ellas, eso no quiere decir que no
desea participar, muchas veces no sabe cómo hacerlo.
Es importante destacar que la pareja
colabore con las actividades del hogar, también involucrar a los hijos, si los
hay. Esto tiene un impacto positivo en la armonía del hogar y fortalece las
relaciones.
También es importante resaltar que hay
relaciones que se han unido durante este tiempo, lo cual los ha llevado a
fortalecerla. De esta manera se sienten que estos tiempos ha creado cierto
espacio de madurez vital y les ha llevado a sentirse unidos. Además, de aprender uno del otro. Como
resultado continuar emprendiendo una relación sana y cuidada.
Uno de los puntos importantes es sentir
que la relación fluye y es sencilla. Cuando hay que invertir tanta energía y
diálogos llega un momento que el agotamiento es tan fuerte que ya se va
distanciado. Un punto importante es sentir que la pareja es nuestr@ mejor
amig@. Sentir conexión con esa persona, que existe entendimiento, respeto,
complicidad, admiración y libertad. Que es una persona con la que se puede
dialogar y llegar a acuerdos de manera sana.
En caso de que la relación de pareja no
se esté viviendo así, comienzas a darte cuenta de que no es el resultado de la
pandemia es que ya la relación trae varios huecos que no han sido cerrados. Lo
que quiere decir es que, si no se puede recuperar la relación, debe terminarse
de la mejor manera, tener la tranquilidad de que se hizo todo y seguir
adelante. De todas formas, en momentos como es posible que se requiera un
profesional de apoyo para avanzar tanto para fortalecer la relación o para
finalizar.